Hacer la diferencia

¿Qué significa hacer la diferencia? Es ejecutar acciones diferentes a las tradicionales y por supuesto buscar sobresalir con ellas de una manera positiva. Encontramos mensajes que nos dicen “este jugador marcó la diferencia”, “este nuevo ministro realmente hizo una diferencia y logró superar la crisis”, entonces todos estamos llamados a marcar esa diferencia que nos coloque en una posición privilegiada.

Hacer la diferencia es una tarea de aquellos que no les gusta el conformismo:

Tomar el camino de lo tradicional, conocido y la ruta corta siempre será lo más fácil, pero eso implica un grado de conformismo, donde aceptas lo existente como una regla escrita en piedra que no se puede cambiar. Si quieres hacer la diferencia tienes que limpiar tu vida de todo acomodamiento, para buscar con mucho entusiasmo una manera adicional de alcanzar las metas y conseguirlo con más eficiencia.

Pensar diferente ya resulta un reto, porque existen una atadura en la parte del poder subconsciente, que solo asimila las ideas a las que estás acostumbrado. Necesitas romper muchos esquemas en tu interior para ver el mundo desde otra perspectiva y así hacer la diferencia en algo.

Consejos para hacer la diferencia:

• Busca algo que quieras destacarte:

No lo veas como una idea que solo te servirá para llamar la atención como suelen hacerlo algunas personas realizando extravagancias. Sino que esa aportación tendrá un fin práctico para que pueda servir a muchas personas. Harás la diferencia en algo que realmente disfrutes, puede ser en la música, escritura, ciencias, etc.

• Haz que el poder de tu mente favorezca tu deseo:

¿Cómo lograrlo? Para ello puedes recurrir a la técnica infalible del poder de las IMÁGENES subconscientes. Todo el mundo físico trabaja en base a información que se procesa en tu mente subconsciente. Si logras relajar la mente y concentrarte en un resultado concreto y entrenas todos los días, llegará un momento en que habrás generado una nueva creencia y con ella encontrarás la inspiración para encontrar el argumento lógico que te permita hacer la diferencia. Incluso las soluciones geniales pueden estar al frente de tu nariz, pero necesitas ese impulso especial que te lo puede dar tu propio poder mental.

• Trabaja y busca contestar diferentes preguntas:

El trabajo conlleva darte una gran cantidad de elementos que te llevarán a un resultado, las preguntas constantes que debes hacerte son: ¿cómo puede mejorarse?, ¿qué hace falta?, ¿qué aspecto aún no se ha cubierto en el mercado?, ¿qué nuevas alternativas pueden surgir?, etc. Esa conducta indagadora y el deseo continuo de ver más allá de lo cotidiano te permitirá marcar la diferencia en algún momento, gran parte de tu éxito depende de tu tenacidad.

• Requieres concentración para avanzar en cierta dirección:

Muchas personas no obtienen resultados extraordinarios casi en nada porque no están concentrados, atienden demasiadas cosas a la vez, están dispersos y por ello no son capaces de llevar sus deseos a su estructura interna. Tú debes evitar ese error y enfocar todo tu ser al proyecto en el cual quieras destacarte. Tu mente creativa te dará increíbles resultados después de un tiempo prolongado perseverando en tus propósitos, los proyectos más grandes dan resultados fascinantes después de años de muchísimo empeño.

Este mundo cada día exige que más personas marquen la diferencia:

Hace 50 años tener una profesión universitaria era un privilegio reservado para muy pocos en ciertos países, ahora ya es algo cotidiano. Por lo tanto si quieres marcar la diferencia, necesitas muchas más competencias que las tradicionales, en especial una conducta ejemplar, porque a partir de tu actitud y responsabilidad que tengas superarte a ti mismo y conseguir enormes éxitos.